17 sept 2015

El buen leñador






"El buen Leñador"Silver Axe, Gold Axe" es un elemento básico en los libros de texto para los niños pequeños. 



Un pobre leñador accidentalmente deja caer su hacha en un estanque en las montañas. Él leñador está muy angustiado y empieza a llorar, cuando un anciano, un dios de la montaña, se eleva desde el estanque con un hacha de oro en sus manos y le pregunta al leñador "¿Esto es tuyo?" El leñador le dice que no lo es. El viejo vuelve con un hacha de plata. "¿Esto es tuyo?" El leñador le dice una vez más que no, que su hacha es  vieja y de hierro resistente. 

El dios de la montaña se conmueve por la honestidad del leñador y le obsequia las tres hachas. 

Un leñador codicioso, que oyó esta noticia se encamino hacia el mismo lugar de inmediato y deliberadamente dejo caer su hacha en el estanque. Una vez más, aparece el dios de la montaña. Se le hizo las mismas preguntas, pero después de haber oído las historia anterior, inmediatamente respondió que sí, tanto la de oro y de plata son las hachas de  él. El dios está muy enojado al escuchar esto desaparece en el agua, y el leñador codicioso se queda sin hachas, ni su propia hacha de hierro.

Cuento Coreano: El buen leñador.

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El buen leñador






"El buen Leñador"Silver Axe, Gold Axe" es un elemento básico en los libros de texto para los niños pequeños. 



Un pobre leñador accidentalmente deja caer su hacha en un estanque en las montañas. Él leñador está muy angustiado y empieza a llorar, cuando un anciano, un dios de la montaña, se eleva desde el estanque con un hacha de oro en sus manos y le pregunta al leñador "¿Esto es tuyo?" El leñador le dice que no lo es. El viejo vuelve con un hacha de plata. "¿Esto es tuyo?" El leñador le dice una vez más que no, que su hacha es  vieja y de hierro resistente. 

El dios de la montaña se conmueve por la honestidad del leñador y le obsequia las tres hachas. 

Un leñador codicioso, que oyó esta noticia se encamino hacia el mismo lugar de inmediato y deliberadamente dejo caer su hacha en el estanque. Una vez más, aparece el dios de la montaña. Se le hizo las mismas preguntas, pero después de haber oído las historia anterior, inmediatamente respondió que sí, tanto la de oro y de plata son las hachas de  él. El dios está muy enojado al escuchar esto desaparece en el agua, y el leñador codicioso se queda sin hachas, ni su propia hacha de hierro.

Cuento Coreano: El buen leñador.

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